Fotos del Voyager para extraterrestres

Al hilo del post anterior (y olvidándonos de la Pantoja), vía un post de El Blog de Eliax llego a la web del programa Voyager , aquel que lanzó hace 30 años dos naves exploradoras al espacio. Principalmente tenían que fotografiar varios planetas externos de nuestro sistema solar aprovechando que estaban relativamente cercanos (alineados, dicen), pero también se les encomendó un trabajo un poco especial: Ser, en el enorme océano espacial, nuestro mensaje en una botella; un saludo en forma de disco de oro puro diseñado para encontrarse con posibles inteligencias extraterrestres que quizás, algún día, intercepten las Voyager. El disco incluía diversa información codificada sobre nuestro planeta, nuestra civilización y nuestra especie. No entraré en más detalles porque las misiones Voyager están muy bien contadas por el propio Carl Sagan en su libro Cosmos

El primer trabajo lo hicieron de forma excelente. Muchas de las fotos que sacaron fueron espectaculares, puedes verlas en este enlace.

Imaginarás que el contenido del disco, aquella "tarjeta de visita" tan especial, fue bastante polémico, o al menos peculiar de seleccionar, ya que había que intentar pensar como un extraterrestre, algo realmente difícil. Se incluyeron fotografías, sonidos, música...

Es especialmente evocador de aquella época echar una ojeada a las fotografías que se incluyeron, aquí tienes la lista completa (aunque no están todas accesibles). Una selección de las mismas puedes verla en esta otra web. No sé si serviría para darnos a conocer a los extraterrestres, dudo que fuesen capaces de decodificar el disco e interpretar algunas de las figuras, como por ejemplo la del ADN, a no ser que su forma de vida se base también en la misma estructura. Y es curioso que se incluyeran algunas fotos como estas:


De cualquier modo, se nota que han pasado 30 años, si ahora se enviasen de nuevo, seguro que serían fotografías bastante diferentes. Al menos tendrían un color más real.

Resulta enormemente poético imaginar a las Voyager vagando por la enormidad del espacio durante decenios o milenios, y cuando estén más lejos de lo que podamos imaginar, una civilización las encuentre y les permita conocernos. Aunque siento ser aguafiestas, pero estando el espacio tan vacío y siendo tan vasto como es, personalmente creo que es mucho más probable que nosotros mismos las interceptemos en un futuro, con naves mucho más rápidas y quizás las conservemos como reliquias de nuestra historia espacial.

Por cierto, en estas misiones es costumbre lanzar las naves de dos en dos, por una sencilla razón: Si una no funciona, siempre queda la otra, y así no se viene abajo todo el proyecto. Y si funcionan las dos, como ha ocurrido a menudo y recientemente con los todo-terreno Opportunity y Spirit, mejor que mejor.