Aclarar primero que el espectro luminoso, es decir, la luz, abarca un amplio rango de frecuencias, de las cuales nuestros ojos sólo son capaces de percibir una parte, lo que solemos llamar "luz visible".
Para que un cuerpo deje pasar la luz es necesario que su estructura a nivel microscópico sea amorfa, es decir, desordenada. Podemos visualizarlo como un muro: Si los ladrillos están ordenados, el muro es hermético. Si no lo están, quedarán huecos que permiten el paso de la luz.
Por otro lado, los electrones de los átomos pueden absorber luz (para posteriormente emitirla en forma de radiación o calor), por lo que también para conseguir la transparencia es necesario que el material esté formado por componentes que no absorban fotones de forma apreciable.
El cristal común cumple ambas condiciones: Su estructura es muy desordenada y sus electrones no absorben las radiaciones del espectro visible, algo que se consigue mediante un proceso de calentamiento a altas temperaturas de la arena de sílice seguido de un enfriamiento muy controlado. Además el material obtenido es suficientemente rígido y resistente (aunque no todo lo que nos gustaría) para su uso en el hogar.
Algo más: El cristal de nuestras casas no absorbe el espectro visible, pero sí el UV (Ultravioleta), aquel que preferentemente hace que nuestra piel tome un color tostado. Así que no pretendáis tomar el sol y poneros morenos a través de la ventana.
(Post antiguo recuperado)
2 comentarios:
Me interesa el tema, pero no me satisface, ya que la luz puede chocar y revotar en los electrones externos, dando el color del objeto. Pero el problema es, porqué un electrón da un color y otro, otro, y más porqué uno lo deja pasar y otro no.
No me molesta que sea publicado, pero me gustaría que me lo hagas saber directo a mi e-mail. oscarernst@gmail.com
los ladrillitos del diamante ¿no estan bien ordenados?. Dejan pasar la luz ¿no?
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