Solo de pensarlo, cansa: Convertir uno de nuestros libros de papel a formato digital parece una pesadilla: Escanear página a página, lentamente, pasando las hojas, ordenar los archivos, convertir las imágenes a texto y guardar. Bufff...
Pues gracias al software habitual es menos complicado de lo que parece. Por ejemplo, con el OCR Finereader se puede hacer en un tiempo muy razonable, según he comprobado. Este soft permite automatizar el escaneo, de forma que tu trabajo se limitará a pasar las páginas y apoyar el libro (si eliges un libro que abierto quepa en la superficie del escaner, ahorrarás la mitad del trabajo). Puedes ajustar el periodo de pausa entre escaneo y escaneo (yo suelo ajustarlo a 10 o 12 segundos), de forma que él solito escaneará, guardará los archivos ordenados, los analizará y los convertirá a texto al momento. Y tú a pasar páginas y a ver un documental o una peli para no aburrirte.
Haciendo los cálculos, si suponemos que tenemos un libro hermoso de 400 páginas, a 12 segundos cada dos páginas, nos da un total de 2400 segundos, es decir, 40 minutos. Redondeando, una horita con descansos. Un tiempo muy razonable.
Y a compartir...
2 comentarios:
O 12 segundos por cada página si vamos de una en una.
Y a eso se debe sumar el tiempo que conlleva el proceso de escaneo de cada una de esas páginas.
Es decir, 80 minutos + el escaneo.
Sigue siendo eterno...
Dice cada 2 claramente
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