Los que soléis visitar este blog y habéis seguido la serie de artículos
comida basura os habréis dado cuenta que las galletas y dulces no son santo de mi devoción. No es que no me gusten, al contrario, pero sus grandes cantidades de azúcares y grasas saturadas los hacen poco recomendables. Bollería, pasteles, galletas y bizcochos tienen gran parte de culpa de la obesidad de las sociedades desarrolladas. Y en algunos casos son difícilmente sustituibles. En la mayor parte de España es complicado decirle a alguien que elimine este tipo de alimentos del desayuno, cuando desde niños, lo primero (y normalmente lo único) que nos metemos entre pecho y espalda es un café (o cacao) con leche, acompañado de sus respectivas galletas o bollitos. Hacerlo de vez en cuando no es ningún problema, como ya he dicho más de una vez no hay alimentos malos, sino dietas desequilibradas, pero es fácil caer en la rutina y dejarnos llevar. Eso de "
la comida más importante del día" nos lo sabemos de memoria, pero es sólo teoría.
Esta es mi propuesta de desayuno sano, intentando "conservar" los sabores cafe-leche-galletianos tan arraigados y considerando el poco tiempo que solemos tener al levantarnos. Por cierto, no desayunes inmediatamente después de levantarte. Hazlo, por ejemplo, después de ducharte, así tendrás un poco más de hambre y lo harás más a gusto.
- Primer ingrediente: Fruta natural, cualquiera es buena. Melón, fresas, pera, melocotón. Mucho mejor la fruta completa que su zumo, que carece de fibra y piel, las partes más interesantes desde el punto de vista alimenticio.
- Segundo ingrediente: Algo sólido y con proteínas. Jamón cocido o serrano, huevos revueltos, pequeña tapa de tortilla de patata o incluso alguna salchicha. Ya sé, por estos lares no estamos muy acostumbrados, pero es cuestión de ponerse.
- Tercer ingrediente: Lácteo. Yogur, queso fresco o leche. Mejor leche desnatada que entera. Mejor sin azúcar y café descafeinado. No, no es la cafeína lo que te mantiene despierto por la mañana, lo que te duermen son los bajones de azúcar.
- Y cuarto, los hidratos de carbono, por ejemplo, acompañando al cafelito. Si son integrales, mejor, una tostada integral es una buena idea. Pero un poco aburrida, ¿verdad? Allá van unas sugerencias de galletas
menos malas:
Gullón tiene una línea de galletas sin azúcar entre las que se encuentran las de la foto,
Diet-fibra (izquierda) y
Diet Nature-Digestiva (derecha, ojo, es una tipo digestive, pero
bastante menos mala que la mayoría). Ambas tienen una relación de ingredientes bastante interesante (pincha para agrandar):
Bajas en grasas saturadas, con aceite vegetal alto oléico, con harina integral y altas en fibra. Una opción a considerar.
Ya verás como afrontas el día con mucho más energía y con menos ansias de comer.