¿Cual puede ser la razón por la que a los seres humanos nos atraiga tanto el ritmo? No me refiero a la música, y menos todavía a la música clásica, que es la que, en general, menos componente de "ritmo" tiene, sino a la percusión casi pura, esa que hace que se nos vayan los dedos, que nos hace agitar la cabeza, que provoca que golpeemos el pie contra el suelo y que nos impulsa a mover el cuerpo espasmódicamente. Al ser humano le ha acompañado siempre el ritmo en todas sus celebraciones, en las alegres, con interminables bailes, y en las tristes, con redobles atronadores retumbando al unísono.
Encuentro en el siempre interesante blog Curioso pero Inútil un enlace a un espectacular vídeo de
Top Secrets Drums Corps, un grupo suizo que combina el ritmo en estado puro con desfiles y pequeños malabarismos. Uno se va contagiando del ritmo y según se acerca el apoteósico final, dan ganas de levantarse y aplaudir sin parar. Es una pena que el sonido de youtube no sea ninguna maravilla, me gustaría escucharlo en toda su calidad digital, pero de todas formas merece la pena.
Tuve un amigo que era arrítmico (no sé si existirá esa "patología"), algo muy curioso, era incapaz de seguir el ritmo en la mili (lo que le supuso unas cuantas guardias), y le costaba muchísimo seguir las melodías, pero sin embargo era un enamorado de la música. Pero es una excepción, la mayoría de nosotros estamos naturalmente preparados para seguir un compás, no sé muy bien por qué. Algunos más que otros, claro está.
Por ejemplo, en este video podemos ver a Tony Royster Jr. , 12 años, con una batería y unos 
palillos haciendo virguerías. Soportar los ensayos de este chico hasta que se hizo estrella tuvo que ser muy duro. Este otro de 7 años también está especialmente dotado. Si seguimos descendiendo en edad, aqui podemos ver a Igor Falecki, tocando la batería con sólo 4 añitos, y aquí a Isiaah Chevrier, de la misma edad y esta vez tocando con sus manos una especie de timbal. Y su hermanito Abdoulaye, con sólo 2 añitos, todavía casi no ha dejado el chupete pero ya sabe pegarle unos toques al tambor. Tarda un poquito en salir en el vídeo, pero merece la pena ver al chiquitillo.
Leo en el excelente blog Fogonazos la historia del tigre de tasmania o tilacino, un animal que, según comenta un seguidor del blog, parece "resultado de una noche de fiesta loca de una cebra, un perro, y un león..."O más que la historia, la falta de historia, por que el tilacino se extinguió en los años 30, sobre todo a causa de la avaricia de los cazadores, que los mataron a miles y la torpeza de los cuidadores del último ejemplar conservado en el zoo, que dejaron que se muriera de frío."A pesar de su forma de lobo y su pelaje atigrado, su procedencia nada tenía que ver con cánidos o felinos. Se trataba de un extraño caso de marsupial carnívoro, con unas mandíbulas realmente asombrosas, capaces de abrirse hasta un ángulo de 120 grados. Este hecho les permitía engullir grandes pedazos de carne y tragar de un modo más parecido al de las serpientes que al de un mamífero convencional.
El tilacino, o tigre de Tasmania, fue declarado extinto en 1986, una vez transcurridos los 50 años sin pruebas de vida que exige la comunidad científica. Aún así, muchos curiosos y turistas aseguran haberse topado con un tilacino desde entonces. En 1973, alguien grabó unas misteriosas imágenes en las que muchos han creído distinguir la figura del tigre de Tasmania."Resulta extraño ver los dos únicos vídeos (uno y dos), mudos y en blanco y negro, que se conservan del bicho. Tienen ese aspecto melancólico e irreal de las filmaciones de principios del siglo 20, pero por lo menos nos queda algo más que del dodo, el pobre pájaro tonto que fue esquilmado sin miramientos... y sin razón aparente.Parece que hay un proyecto para la recuperación del tilacino por clonacion, pero la información que he encontrado en Google es confusa. Si alguien sabe algo más al respecto, se agradecería.Ah, por supuesto, el tilacino ya no existe, pero tiene su web; http://www.tasmanian-tiger.com, en la que hasta se regala un libro electrónico del tema. Todo en inglés, claro.
He encontrado el la web de Instituto Vasco de Estadística (Eustat) un curioso documento. Se trata de la "Nomenclatura de actividades personales de la vida cotidiana"(archivo xls Excel), y pretende ser
una relación de todas las cosas que se supone que hacemos en nuestro día a día. A cada una le asigna un numerito y así es más manejable para tratarla en lo que se tercie, supongo que sobre todo en estudios estadísticos varios.Los grupos de actividades son los siguientes (¡esto es todo lo que hacemos!):- Necesidades fisiológicas
- Trabajo profesional y formación
- Trabajos domésticos
- Cuidados a las personas del hogar
- Vida social
- Ocio activo: deportes y actividades ligadas al ordenador personal e internet
- Ocio pasivo y aficiones
- Trayectos
Tras una primera lectura me han llamado la atención algunas cosas:- En el apartado relacionado con el ordenador no está "Bloguear" o "Escribir un blog". Aparecen los foros y chats, el correo y los juegos, pero supongo que la nomenclatura es de hace unos años y todavía no había llegado el boom de los blogs. Y estoy seguro que algunos-bastantes le dedicamos mucho tiempo...- Hay un apartado de "Ocio pasivo y aficiones", con un subapartado llamado "Sin Actividad" que incluye; Relajarse, no hacer nada, esperar a alguien, fumar... ¡Pensar y reflexionar! Vamos, metiendo en el mismo saco el pensar y el no hacer nada, una bonita muestra de cómo desde las instituciones se le da la importancia que se merece a usar el coco.- En el apartado de "Ocio Activo" Hay dos tipos de paseo, el "Paseo" a secas y el "Paseo recogiendo fresas, moras, castañas..."(¿?). Yo añadiría "Paseo mirando mozas/mozos", "Paseo mirando escaparates" e incluso alguno que otro más.- ¿Dónde está el sexo? No aparece de forma explícita, represión habemus... ¿Quizás estaría incluido en "Necesidades fisiológicas - actividades privadas"? Aunque a mí también me cuadra en "Vida Social", no sé, quizás habría que distinguir si es en solitario o con otras personas. O tal vez el tiempo que le dedicamos es tan poco significativo que ni lo han incluido (a pesar de los 118 coitos al año de media que sale en el estudio anual de Durex - gracias por el link, sexólogo - a causa de los fantasmones de siempre).- Se nota el origen vasco: Distingue "Ir de potes" (sic), tomar vinos, de "Ir de copas".Puede ser divertido intentar encontrar todas nuestras actividades, para comprobar si están. Quizás practiques alguna que no se les ha ocurrido a los estadísticos. ¿Eres lo suficientemente original? O buscar ideas de cosas para hacer, quién sabe si el pasear recogiendo fresas y castañas acaba siendo tu afición favorita...
Es un servicio muy conocido, pero quiero volver a recordarlo porque me parece estupendo: Pandora.
La verdad es que el nombre, aunque suena bien, es poco prometedor: Pandora, la primera mujer creada por Zeus, llevada por su curiosidad abrió la caja que le había dado Hermes y liberó la desgracias en el mundo. Fijaos en el enfoque machistorro típico de muchas religiones, echando la culpa a la mujer en la primera ocasión.
Bajo este mitológico nombre encontramos un servicio de música online muy especial. No tienes que "tragar" la musica que te ponga, ni siquiera tienes que buscar el tipo de música que te apetece, Pandora lo hace todo actuando de la siguiente forma:
1-Le dices alguna canción o autor que te guste
2-Te pone canciones "similares" y le dices si te gustan o no, para que vaya "afinando"su conocimiento sobre tus preferencias.
Y ya está. Y al menos en mi caso, lo hace muy bien. Es un placer eso de que, incansable, Pandora te vaya poniendo temas, muchos desconocidos e inesperados, bastante ajustados al estilo que le hayas sugerido. Vamos, que es cómodo, autónomo, suena bien y te permite conocer nuevas canciones.
No pide nada a cambio (un poquito de publi, pero mientras no la mires...) , aunque tienes que registrarte (puedes probarlo durante unos minutos) dando lo habitual: el email y una contraseña. Podrás guardar tus preferencias y crear diferentes "stations" (hasta 100) con diferentes estilos, en función de la música que te pueda apetecer escuchar en cada momento.
