Sólo un comentario sobre el movimiento "Democracia Real Ya", que he seguido muy de cerca por internet durante su gestación, y que a muchos desconectados les ha pillado por sorpresa (grandes medios de comunicación incluidos): Me alegro mucho que exista y mucho más tras las barbaridades que está diciendo la derecha más radical sobre él. José María izquierdo hace un excelente resumen de lo que las hordas de extremistas de Libertad Digital han escupido, en el que Juan Morote se lleva la palma:
"...Un grupo de desarrapados, susceptibles de desinsectación urgente, han tomado el espacio público de la Villa y Corte so capa de un eslogan auspiciador de la Democracia Directa. (...) En primer lugar, estos niñatos que protestan en el asfalto y bajo la luz artificial son los hijos de los que soñaron con haber estado en París en el 68 (…) En segundo lugar, son pseudomarginales desencantados con una sociedad que pretende obligarles a esforzarse y trabajar para tener una oportunidad. Y en tercer lugar, son una panda de andrajosos malcriados que suben al Mercedes de papá con los pantalones rotos bien arrastrados por el asfalto.
Para vomitar...
Añadido posterior:
Si quieres conocer más a este personaje, aquí tienes un vídeo suyo y aquí su cuenta de Facebook si quieres ser su amigo. Gerente de la Universidad Católica de Valencia tenía que ser...
Madre mía... Te copio y amplío:
ResponderEliminarhttp://sexoconsultas.blogspot.com/2011/05/hacemos-algo.html
Las revoluciones que han originado los importantes cambios sociales que hemos vivido ,casi siempre viniveron de las clases populares y/o de izquierdas.
ResponderEliminarEn esta ocasión la INDIGNACION propugna medios pacíficos y movilización para cambiar.
La izquierda, consciente de que la mayoría de indignados no estan en sus filas, intenta mediatizar y capitalizar el movimiento.
Como decía Alvin Tofler "las discusiones entre izaquierdas y derechas son algo parecido a las de dos señores en las tumbonas de cubierta de un trasatlántico que se hunde..."
unicamente desde una AUTENTICA POSICION de CENTRO, al márgen de las dos caducas tendencias decimonónicas, puede profundizarse en la busqueda de las nuevas respuestas que necesitamos.