¿Y a qué esperas? La nueva versión del navegador del zorro es, sencillamente, imprescindible. Siempre ha ido mucho más amigable y cómodo de usar que el navegador de Microsoft, sobre todo cuando las webs dejaron de estar "diseñadas para Internet Explorer". A partir de la versión 2.0 empezó a pesar demasiado, pero esta nueva versión soluciona los problemas de gestión de memoria y corre como el viento. Al menos en mi ordenador, un vetusto pentium IV 1.8 Mhz, junto con tres excelentes complementos: El Diccionario de Español, el sincronizador de marcadores Foxmarks y el traductor universal Gtranslate. Además, trae un montón de nuevos detalles y un lavado de cara más acorde con los diseños compu-tecnológicos actuales.
Por cierto, con esta tercera edición del Firefox se pretendía batir el record Guinness de descargas de un programa en 24 horas. El 18 de junio, el "download day". se llegó a los ocho millones. Una barbaridad, pero no puede decirse que se batiera nada, porque era un record que no existía. Aunque a ver quien es el guapo que supera esa cifra...
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